Comisión de la Abogacía Digital
Perlas tecnológicas. Nº 8
15 marzo 2019
Los contratos inteligentes. Smart Contracts
¿Qué son los contratos inteligentes o smart contracts?
Las nuevas tecnologías evolucionan a un ritmo vertiginoso un smart contract es un código informático que ejecuta las condiciones del acuerdo de forma automática, simplificando al máximo los procesos que intervienen en este tipo de transacciones. Este tipo de contratos elimina los intermediarios habituales, como por ejemplo los notarios, y establecen un nuevo tipo de contrato totalmente descentralizado, de manera que ningún sujeto tiene más control que el resto sobre los activos del smart contract. Además, el cumplimiento del contrato no está sujeto a la interpretación como podría ocurrir con los contratos tradicionales, sino que las condiciones se cumplen automáticamente cuando se completa lo acordado.
Para autoejecutarse, los smart contracts se sirven del blockchain, la tecnología utilizada por Bitcoin, para verificar si las condiciones establecidas por las partes se han cumplido o no.
En 1995, el informático y criptógrafo Nick Szabo acuñó el término smart contract, la tecnología existente en aquel momento no permitió desarrollar lo que años más tarde, en 2009,se convertiría en el blockchain y la criptomoneda Bitcoin,desarollada por Satoshi Nakamoto.
Los smart contracts se almacenan dentro de la blockchain o cadena de bloques, toda la información de la cadena de bloques se encuentra cifrada y es inmutable, lo que convierte el blockchain en una tecnología muy segura para hacer transacciones con dinero.
Las ventajas de los contratos inteligentes son considerables si se tienen en cuenta el ahorro de costes que supone la eliminación de intermediarios, la privacidad, garantizada por el cifrado de la blockchain, y su velocidad de actuación, ya que las tareas se ejecutan de forma automática sin depender de acciones manuales.
¿Para qué podemos utilizar un smart contract?
La tecnología de los smart contracts, aunque desconocida, ya está a disposición del gran público a través de plataformas como Ethereum, que se creó específicamente para desarrollar contratos inteligentes con blockchain. Algunas de las aplicaciones más comunes de los smart contracts:
- Seguros: Los partes de accidente se podrían ejecutar casi de forma inmediata, ahorrando al usuario las acciones de peritaje y el consiguiente papeleo para que el ingreso sea automático.
- Préstamos: Si la persona que ha contratado un préstamo no realiza los pagos en el tiempo establecido, el contrato podría rescindirse inmediatamente y retirar los fondos.
- Herencias: Habiendo establecido previamente en el contrato cuál sería la asignación de los activos, en caso de fallecimiento, el reparto de las propiedades y del patrimonio entre los herederos sería instantáneo.
Las posibilidades de los smart contracts son, por ahora, incalculables: servicios financieros, energéticos,públicos. Creándose un nuevo modelo de negocio que poco apoco se abrirá paso en la vida cotidiana, empezando por la sustitución de los contratos tradicionales por contratos digitales.
Comisión TIC del ICAVA.